17 de octubre, 2009
Antes de escribir sobre este invento, se debe de tener en cuenta, que puede ser pocas veces bueno y casi siempre malo.
Existen estudios que relacionan el ver la televisión con la obesidad y el sobrepeso en la infancia y, por lo tanto, con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias en la edad adulta.
Si se desea detectar a una familia sana, se podrá ver entre otras cosas, en que a sus hijos le limitan el tiempo de ver el televisor y menos aun que tenga un televisor en su habitación, entonces apaga y vámonos.
Cuando el visionado del mismo se sucede con escenas violentas, con una gran carga de agresividad, hay estudios que demuestran la influencia negativa en el rendimiento escolar y en el desarrollo de una conducta sana, cuando ocurre en adultos, estos se aborregan y llegan a creerse ser casi los protagonistas de sus series favoritas y como algunos locos, son capaces de tirarse por un 10 piso con una capa de Superman.
La televisión acarrea problemas, utilizada adecuadamente puede convertirse en un buen elemento de educación, pero si se hace de forma abusiva se transforma en nocivo para el cuerpo, la mente, el espíritu y para el alma.
Según los estudios sobre el tema en cuestión, es que los niños que tienen un ordenador en su habitación y no la televisión, logran mejores resultados en sus respectivas pruebas, y al ver la televisión demasiado se corre el riesgo del abandono de los estudios, la expertos llegan a una síntesis, nos dicen cuanto menor es el consumo televisivo en la infancia y adolescencia mayor es la posibilidad de terminar estudios universitarios. Por contra, cuando más se ve, mayor riesgo existe de no pasar estudios primarios.
En los hogares norteamericanos, lo que prima y quizás el deporte favorito, es ver la televisión, es la mayor de sus actividades y curiosamente es donde existe más obesidad más violencia, y personas inmaduras, se le podría llamar al televisor en ese país el ELEFANTE DORMIDO.
La buena recomendación para los padres sería que ofrezcan a sus hijos buenos programas, con contenido educativo según y apropiado a su edad, porque también es cierto que puede ser una herramienta a tener en cuenta, de valor para estimular su desarrollo cognitivo, por ejemplo del tipo de “Barrio Sésamo” o algunos dibujos animados para niños de 6 o 7 años que les resulte divertido, por su carácter de aprender, en algunos se puede estimular las matemáticas y mejorar si bien no mucho el lenguaje, para mejorar el mismo sería mejor la lectura de la literatura para esas edades.
España se parece cada vez más a los EEUU, y cómo no en el tema de la televisión, ahora se puede observar a niños de corta edad, obesos, y en la adolescencia, pidiendo una pizza para ver un programa violento o comiendo una hamburguesa mientras juegan a la Play Station.
Me parece un cuadro tétrico el ver a un obeso fumando en el sofá de su casa viendo programas que solo sirven para manipular las mentes y luego tomando una cerveza contándote su serie favorita, que es una estupidez irrisoria, inmadura y fruto de que los que le rodean se rían de él en su fuero interno, sabiendo que es una presa débil, debido a que su talón de Aquiles es la manipulada TV, por gobiernos y gentuza que saben como manipular las informaciones, aborregar con programas nocivos, y a empujar a la persona a que realice cosas extrañas, como por ejemplo sexo a los 14 años y luego a llorar una familia entera porque su hija o hijo, le gustaba la serie.
EL BORREGO ENGORDA PARA EXPLOTAR
Recent Comments